domingo, 9 de septiembre de 2018

Exposición gráfica y literaria en Galeria Ortiz-Contemporary ART, Ciudad Rodrigo (Salamanca)


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Mi gratitud a la Galería Ortiz-Contemporary Art, de la vieja ciudad mitrada del Conde Rodrigo
(Salamanca) por publicar en su muro el buen libro de fotos que hizo Santos Vicente Vicente. Yo tuve
oportunidad de colaborar con mis textos, y quedó un ejemplar "único" de lujo que merece, para
fortuna del autor gráfico, estar ahora expuesto en una Galería de Arte. Felicidades.

 
He rescatado la pantalla del muro que tiene en Facebook, la Galería Ortiz-Contemporary ART de 
Ciudad Rodrigo (Salamanca). Agradecido por destacar junto con el artista gráfico Santos Vicente 
Vicente, la modesta colaboración que le hice con mis letras. Me alegro por todos en esta inicitiva, y 
es de esperar que por las RRSS alcance la difusión que merece.

Esta portada es una gozada. Al autor no le hacen falta palabras, para decir lo mucho que quiere a la 
vieja ciudad amurallada, capital de Campo Charro. Para mi un honor el figurar junto con él. Dentro 
tiene el lector muy buenos momentos, para disfrutar de fotos monumentales y algo de prosa que las 
complementa.


 

Esta foto nos la hizo Dori, mi esposa, por el verano del año 2015. Además, en una prueba que hice yo 
en Power Point, tuve a bien poner las correspondientes advertencias legales. — con Santos Vicente 
Vicente.

 





Preciosa panorámica de Ciudad Rodrigo, a doble página. Hay que tener paciencia infinita, y llevar su 
correspondiente cámara, con tal de esperar el momento oportuno, la luz precisa, para disparar y dejar 
quieto -para siempre- un instante tan bonito.




La primera foto, como tantas más de Santos Vicente, lo dice todo. Nada de lo de hoy se parece a 
cualquier noche durante la francesada, allá por el siglo XIX, cuando la fiel infantería del emperador 
francés hiciera sus intentos para conquistar -como así hicieron- este gran baluarte. Nada más lucerían 
las antorchas, y el relámpago de los cañones... Aquellos con los cuales, a su debido tiempo, tiraban 
bombas a Cádiz, tan fanfarrones los frances, y con ellas se hacian las gaditanas tirabuzones.



He querido buscar en mis archivos de texto, las líneas con explicaba yo  
mis impresiones ante una  gran foto como es la hoguera ante la S.I. 
Catedral. No lo encuentro ahora, tal vez es muy tarde ya, y
para no esperar al día me inclino por captar la pantalla de mis 
pruebas...








Por el antiguo puente, pasando la procesión camino de la Ciudad que es dos veces ciudad. Aparte 
inserto el texto, pues a simple vista no se puede leer bien en esta captura de pantalla.




La salida por la rúa del sol, y un gato que pasó en ese preciso momento.



Esta foto es de las que más me han impresionado, porque es una exclamación constante. La gárgola 
grita, parece que está gritando siempre. Mi explicación está para el lector en esta misma página, un 
poco más abajo.



Esta es otra de las panorámicas que más gustan a Santos Vicente. Otra cosa es que la grey respete la 
ilumininación monumental. ¿Alguien se imagina una ciudad fortificada así, en Alemania, en Rusia, 
en la República de los Estados Unidos de América del Norte...?




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sábado, 8 de septiembre de 2018

S.D.R. ANTXETA 50º Aniversario (año 2017) en Sagüés. SAN SEBASTIÁN.

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Interesante portada, por su moderno diseño, donde la gaviota parece volverse y mira el barrio de
 Sagüés, al final de la playa de la Zurriola actual (antigua Gros). Editado con motivo del 50º 
aniversario de la Sociedad Deportiva y Recreativa ANTXETA, el pasado año 2017. Una edición de 
100 páginas con texto bilingüe, muy ilustradas, donde se recorren cincuenta años de una entidad 
social y gastronómica fundada sin ánimo de lucro por los propios vecinos del popular barrio 
donostiarra.

La siguiente foto es parte de una de las paredes, dentro de la sede social de Antxeta, con el farol de 
cubierta de un barco cualquiera, simil de un foco de atención y reunión en el salón principal de su 
local. Como dice su presidente Xabier Urbeltz, en el prólogo: Punta de lanza de los afanes de todo el 
vecindario, la naciente SOCIEDAD venía a ser patrocinio de un compromiso en el reconocimiento de 
una fuente de hermandad vecinal, como garantía de vida colectiva.




El libro combina de forma muy atractiva tanto la palabra como sus imágenes. Cómoda letra,
agradable de leer, nos ofrece un paseo por la capital de Guipúzcoa, sus avances, el lujo de la Belle
Époque, y el sencillo florecimiento de un barrio humilde a los pies del Monte Ulía: EL ENSANCHE
DE GROS.

El carácter semi-industrial (talleres y pequeñas industrias alejadas del centro) con el que el
Ayuntamiento concibe este barrio en un principio y un diseño urbanístico un tanto desordenado,
hacen que a medida que avanza la expansión de Gros, se vaya conformando una mezcla tanto
arquitectónica como social bastante peculiar, en la que existen construcciones como las del primer
ensanche y palacetes en primera línea de playa, con otras zonas pobladas de gente humilde, en
construcciones modestas y de dudosa calidad.





En la década de los cuarenta la mayoría del vecindario era originario de Navarra y de pueblos del
interior de Guipúzcoa. Cercanos ya a los 50 vinieron famlilas de otras partes de la Península que, sin
ningún problema se intengraron en lo que había en este barrio. Entre los años 50 y 60 yo conocí de
niño las fachadas que se muestran en la doble foto. Y pasado un tiempo incluso tuve noticias de la
posible demolición del barrio, con tal de hacer viviendas de lujo tipo chalet, cuya futura normativa no
entró en vigor gracias a la fuerte oposión social que todo el barrio, al unísono, mostraron frente a las
autoridades sociales del Ayuntamiento donostiarra.

En la década de los años 60 el fenómeno de las sociedades se va asentado por todo San Sebastián, 
sumando entonces un totald e 54 socidades. En Sagüés, entre algunos vecinos comprometidos con las 
carencias del barrio y con las actividades que venían realizando, fue tomando forma la idea de 
construir una sociedad popular.

El local adquirido, antigua cuadra de corderos y posterior garaje, fue acondicionado por los propios 

socios promotores; todos ellos colaboraron según sus capacidades profesionales: albañiles, 
carpinteros, electricistas, fontaneros, pintores, etc.

Un 6 de Enero de 1967 se inauguró la sede social, y al igual que otras sociedades populares 

donostiarras hubieron de superar directrices políticas de la época para constituirse como sociedad 
gastronómica, obligando su inscripción como Sociedad Deportiva Recreativa.


 
Han tenido el buen gusto de editar, a doble página, y sobre papel similar al de un cuaderno con 
páginas cuadriculadas, la relación completa de los socios fundadores de la S.D.R. ANTXETA.

Con el número 26 figura mi primo hermano Pedro Ortega Uzcudun, de quien siempre recuerdo su
período militar obligatorio en Madrid. Era alto y flaco, vestido de uniforme, llevando sobre la cabeza 
un gorro del cual pendía una borla que parecía bailar sobre su frente.

Fue un tiempo muy entrañable, porque durante su excedencia forzosa pudo residir en Madrid y
ayudar a mi padre, oficial de oficio pintor en Renfe, quien como tantos otros se buscaban una labor 
añadida para poder subsistir con algo más de economía. En muchas ocasiones, mi primo Pedro fue 
ayudante de mi padre, Pedro también, en los tiempos aquellos de tanta escasez, realizando trabajos de 
pintura y obteniendo así un complemento para el escaso sueldo de un sencillo  soldado en tiempos de 
dictadura.

Las fotos de tamaño carnet, enmarcadas, como se observan en la fotografía a doble página, siempre
la ví, durante muchos años, luciendo en la parte central del salón, detrás del mostrador sobre el cual
los propios socios solían despachar cafés, postres, licores. O más curioso todavía, hacer las cuentas
para autoliquidar los gastos que comprendían el uso del local: manteles, cubiertos, manteles, y los
correspondientes consumos de cerveza, sidra, vino o refrescos. Hoy me parece que dicho cuadro se
ha reservado, toda vez que gran parte de los socios fundadores fallecieron.

 
El libro va terminando con muchas páginas dedicadas a los acontecimientos sociales del barrio, y 
donde esta sociedad popular ha tenido tanta participación en el transcurrir de los 50 años de su 
historia: Los concursos de pesca, al tener como tienen ante la misma puerta el imponente mar 
Cantábrico, muchos recortes de prensa, la constitución de su "Asociación de Vecinos" para defender 
los intereses sociales del vecindario, el Carnaval, el Deporte, el mus, y la fabulosa comparse de 
Caldereros de la Hungría en el barrio de Gros.

Mención especial se dedica a la nueva fisonomía urbana, lo que es Sagües en el siglo XXI, Con el
cambio de siglo se reactivaron las mejoras necesaria, se puso en marcha la rehabilitación de las 
viviendas y se mejoró la urbanización del barrio. Al mismo tiempo se construyó un parking 
subterráneo, y se puso en marcha también una estación de bombeo para favorecer la limpieza de las 
aguas...

Para el final, he escogido esta doble página cuya imagen he visto muchas veces, en tantas ocasiones 
cuando hemos acudido con la familia a la Sociedad. Al fondo de la cocina, lucen como el oro sus 
sartenas colgadas. Tal es su norma que todos los utensilios deben quedar relucientes para la siguiente 
jornada.

Hoy ya tienen un contrato con personal de limpieza, pero esta labor fue durante muchos años misión
de los propios socios intervinientes en la elaboración de sus reuniones gastronómicas. Cuestión que 
se solía observa mucho, así como la autoliquidación de gastos, la contabilidad anual y tanta tarea 
como esto suponía en tiempos donde no había calculadoras ni ordenadores que ayudaran a la 
contabilidad que hoy se realiza con toda normalidad.

Es más, hubo un tiempo inicial donde las damas no tenían acceso al local; esposas, novias o
familiares que por su condición de ser mujer no entraban. Afortunadamente con el tiempo esta norma 
social pasó a mejor vida, y hoy día la S.D.R. ANTXETA es participada y compartida con toda 
normalidad por vecinos y vecinas del barrio de Sagüés.

Al izquierda de la foto, un texto en euskera expresa lo siguiente hacia las personas que han
intervenido en el diseño de tan entrañable publicación:

"Con afecto, estamos agradecidos a todos aquellos que han colaborado en este libro. Un gran beso".
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jueves, 6 de septiembre de 2018

Revista CELCE MAGAZINE Nº 92 - Mes de Septiembre de 2018

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 “Su nombre cita su ubicación, pues la factoría se situaba próxima a un histórico 
templete, cobijo de la Cruz del mismo nombre emplazada en las afueras de Sevilla. 
Desde 1937 se constituyó en Sociedad Anónima, y en la década de los años 
cincuenta inició una gran expansión por su inquietud investigadora, social e 
innovación tecnológica, con avances paralelos en distintos mercados e incorporando 
otras prestigiosas empresas del sector. Llegó así, en 1986, a considerarse el primer 
grupo cervecero en España por volumen de elaboración, participando entonces con 
un índice ligeramente superior al 20% del total de la producción española.”









 

El párrafo no es mío, pertenece a un catálogo corporativo editado por el Grupo Cervecero 
Cruzcampo en 1987, con un titular bilíngüe bien atractivo: UNA HISTORIA NACIDA EN 
1904. Se trataba de una publicación interna, de la cual -como mínimo- cada empleado 
recibimos un ejemplar. Casi cien páginas, encuadernadas con portada y contraportada, 
reforzadas con una doblez, tamaño de 21 x 30 cm, decorando ambas mediante selección 
de etiquetas utilizadas por sus empresas agrupadas como cito a continuación:

Empresa matriz: La Cruz del Campo, S.A. Empresas filiales: Henninger Española, S.A., 
Madrid. Industrial Cervecera Sevillana, S.A., Sevilla. S.A. El Alcázar, Jaén. Juan y Teodoro 
Kutz, S.A., Arano (Navarra). Distribuidora La Cruz, S.A., Sevilla. Empresas participas: S.A. 
Balear de Cerveza, Palma de Mallorca. Alhambra, S.A., Granada. Lúpulo y Derivados, S.A. 
Sevilla. Estas formaban unos pilares repartidos por toda España, gracias a los cuales se 
llegaría a consolidar el Grupo Cruzcampo, S.A., mediante fusión por absorción al poco de 
celebrarse en Sevilla la recordada Exposición Universal Expo'92.





En sus primeras páginas hizo una introducción histórica de la inicial Cruzcampo, fundada 
en el citado 1904 por don Roberto Osborne Guezala, como primera fábrica de cervezas en 
Andalucía y una de las primeras en nuestro país. Incluye fotos históricas de variado 
tamaño: jardines en la empresa inicial, su antigua tonelería en los años 30, el embotellado y 
completando a mano sus cajas de madera, o una primitiva sala de máquinas.

Respecto a Henninger Española, S.A., abre la sección una etiqueta, emulando el modelo 
original alemán, indicando se trataba de “Cerveza Especial Pilsen”, fabricada en el antiguo 
solar de la calle Samaniego, s/nº en Madrid. Fue adquirido la mayor parte de su capital en 
1969 por la empresa andaluza, y cuando se editó este catálogo Henninger tenía una 
capacidad para producir 65 millones de litros/año de cerveza, con proyectos de ampliación 
hasta los 150 millones. También incluye un catálogo fotográfico de los distintos tipos de 
cerveza fabricada, muy cerca de las pistas del entonces aeropuerto de Barajas.





















Seguía Industrial Cervecera Sevillana, S.A., con un modelo de etiqueta donde el símbolo de 
la estrella recordaba a otra original marca en Cataluña. Constituida en 1956, se inauguró en 
1961 sobre un solar de 60.000 m². En 1975 se integró a Cruzcampo al adquirir ésta su 
accionariado mayoritario, modernizándola hasta alcanzar los 60 millones de litros. Como en 
las anteriores, incluyeron foto de sus envases y columna de grifo. Desde 1977 elaboró y 
comercializó también el refresco Trinaranjus.

Después Alcázar Premiun, en cuya etiqueta se hacía mención a la marca propia de Jaén, 
como fue El Alcázar y otra cerveza con emblema de Calatrava en Ciudad Real. Desde 1921 
la empresa jiennense adquirió gran prestigio al norte de Andalucía y zonas de La Mancha. 
En 1985 Cruzcampo adquiere la totalidad de su capital social, alcanzando en esa época 
una producción de 40 millones de litros anuales de cerveza. 


 

















 

Una antigua etiqueta, a doble página reproducida de su modelo “Keler de Luxe Beer”, abría 
paso al relato de los orígenes de la fábrica Juan y Teodoro Kutz, familia que llegó a San 
Sebastián instalando su primitiva cervecería Alemana. Mediados los años 80 tan moderna 
fábrica se ubicaba junto a los manantiales del río Urumea, en Arano, Navarra. Incorporada 
el Grupo Cervecero Cruzcampo en 1986, fabricó las acreditadas cervezas Keler 18, Keler 
18 Browm (cerveza negra) y Keler Bock, además de las marcas León Pilsen y León 
Premium.



 



 


Fundada en 1977, la S.A. Distribuidora La Cruz, tenía por objetivo optimizar la distribución 
de los productos comerciales en diferentes mercados. Contó con una amplia red dotada 
con más de 25 vehículos que canalizaron ventas superiores a los 10 millones de litros/año. 
A finales de los ochenta implantó un sistema informático para suministro y reposición de 
cerveza en puntos de venta, agilizando la gestión, además de mejorar la atención a clientes 
y consumidores.








Terminaba esta publicación corporativa citando a sus empresas participadas: S.A. Balear 
de Cervezas, Alhambra, S.A. más Lúpulo y Derivados, S.A. La primera extendía su 
mercado por las bellas Islas Baleares, con una producción anual cercana a los 20 millones 
de litros; la segunda contaba un acentuado prestigio en Granada, con una gama de 
productos de reconocida aceptación, manteniendo un mercado fiel y una producción 
entonces superior a los 30 millones de litros anuales. En 1977 nació Lúpulo y Derivados, 
S.A. con la participación de La Cruz del Campo, S.A., Damm y Steiner Hops; su objetivo 
principal era transformar la flor de lúpulo en pequeños comprimidos que recibieron el 
nombre de pellets.


 






















Como pueden leer mis lectores, todo un récord empresarial en aquellos irrepetibles años 
ochenta han quedado resumidas en breves líneas. Seguramente les hubiera detallado 
mucho más este acontecimiento grupal, pues no en balde participé en su desarrollo desde 
un modesto puesto en la fábrica que tuvo Cruzcampo en Madrid. Y mi recuerdo siempre 
estará acentuado porque aprendí mucho de aquellos técnicos andaluces, pensando que 
llegarían vistiendo traje corto y sombrero cordobés. Por fortuna no fue así, y siempre 
contarán con mi gratitud por cuanto aprendí de mano de sus técnicos.

Y la misma gratitud, para Juan Oliver Arrom, de los más veteranos socios que dispone 
CELCE, por el detalle que ha tenido al facilitarme desde su querida tierra malloquina esta 
publicación. ¡Salud y suerte a todos!
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sábado, 1 de septiembre de 2018

Revista MADRID HISTÓRICO Nº 77 Septiembre-Octubre 2018

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Para comenzar bien el mes, el cartero me ha dejado en el buzón la revista
MADRID HISTÓRICO, nº 77 de Septiembre-Octubre 2018. Detalle que 
agradezco a sus editores, e interés por publicar mi trabajo dedicado a la
desaparecida marca de cervezas S.A. EL ÁGUILA. En honor a todos sus 
trabajadores, ¡Salud!.



Portada con un stand de EL ÁGUILA         Contraportada formada con 4 anuncios.


















Páginas 3 y 4 de la revista, destacando artículo.




















Págs. 46 y 47 donde comienza el trabajo. Hasta la
página 61, incluida la Bibliografía.
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